Luego de haber trabajado durante veinte días en el denominado ‘Sitio SADOS‘, personal de la Dirección Provincial de Museos rescató una importante cantidad de objetos de valor patrimonial que fueron trasladados al CADIC, y que se presume que tienen una antigüedad de 5000 años.
“Se excavaron 30 metros de profundidad y lo positivo es que se recuperaron una importante cantidad de materiales en un contexto adecuado para su estudio”, dijo el Director en Arqueología encargado de los trabajos en San Martín y Onas, Dr. Francisco Zangrando.
“Esto incluyó restos de alimentación de los pueblos originarios, las herramientas que usaban para procesar los animales que consumían como punta de arcón confeccionadas de huesos, ornamentos, en base de ello pudimos reconstruir el pasado”, explicó.
Se trata de puntas de arpones, fabricadas por los primeros grupos canoeros que habrían llegado a lo que hoy es Ushuaia hace 6500 años, durante una segunda oleada migratoria, y que contaban con otra tecnología y otra adaptación a la vida próxima al mar.
En 1975, un grupo de obreros municipales que se encontraba trabajando en la construcción de la escalera que conecta a las calles San Martín y Deloqui, descubrió por primera vez este yacimiento arqueológico.
En base a las herramientas encontradas se pudo conocer más datos sobre los antiguos habitantes del territorio, cazadores recolectores náuticos, especialistas en la caza de lobos marinos y expertos conocedores del litoral marino.
“El rescate en el centro de la ciudad nos hace profundizar de la historia de la Bahía de la ciudad, una historia que comenzó mucho antes de lo que conocemos. A través de esta recuperación nos permite reconstruir un conocimiento en una línea de tiempo muy extensa”, entendió el profesional en arqueología.
En este caso puntual era previsible encontrar esos rastros ya que en la década del 70 cuando se construye esa escalera se da conocimiento de espacio. “Cuando se tomó la decisión de hacer una edificación, el paso previo era el rescate arqueológico. Lo interesante es que el lote de al lado no estaba previsto, pero al pasar las maquinas, vimos que el sitio de extendía, así debimos trasladar el trabajo”.
Sobre la existencia de otros restos arqueológicos bajo la calle San Martín, dijo que “no podemos presumir que no existan”, y que “de acá en más cualquier actividad que quiera hacer se requiere los estudios de impacto necesarios para predecir evidencia de un patrimonio arqueológicos o no”.
Además de contar con el Dr. Francisco Zangrando, el equipo estuvo conformado por la Dra. en Arqueología e investigadora del CADIC, CONICET, Angélica Tívoli y el Lic. Martín Vázquez.
El trabajo de rescate fue requerido por la Secretaría de Cultura a través de la Dirección Provincial de Museos y Patrimonio y la Dirección de Desarrollo Urbano Ambiental y Ordenamiento Territorial Municipal a solicitud de la Empresa Habitar y en el marco de lo establecido por la Ley Provincial N° 370 y la Nacional N° 25.743.