En Ushuaia el aire es más puro gracias a la cuarentena

La cuarentena modificó por completo la vida de los humanos en todo el mundo. Y mientras gran parte de la población se encuentra puertas adentro, la naturaleza, en todas sus formas, se despierta y se atreve a transformarse también. Así está ocurriendo en Ushuaia

A causa de la cuarentena impuesta como medida preventiva para el control del COVID-19, se están observando variaciones en las concentraciones de ciertos gases relacionados con la contaminación del aire.

Así lo reporta nuestra estación de Vigilancia Atmosférica Global Ushuaia (VAG Ushuaia), que analizó las masas de aire y observó que el monóxido de carbono (CO), el dióxido de carbono (CO2) y el ozono superficial (O3) sufrieron modificaciones en sus concentraciones. Estos gases se vinculan con la calidad del aire.

El CO y CO2 son contaminantes gaseosos del aire que se forman por la combustión de los combustibles fósiles, mientras que el ozono superficial, es un contaminante secundario que se forma como consecuencia de ciertos de precursores e interactúa con el CO. Todos estos gases, en elevadas concentraciones, causan efectos adversos para la salud y los ecosistemas.

Desde hace años, la estación VAG monitorea el comportamiento de diversos gases, muchos de los cuales vienen mostrando un aumento exponencial a nivel global debido a la actividad humana. Sin embargo, en las últimas semanas, los valores registrados en la estación VAG Ushuaia reflejan una inusitada disminución de algunos gases.

Lino Condorí, Responsable de la estación VAG de Ushuaia, en comunicación con FM Master’s, explicó el trabajo que lleva a cabo la estación: “Nuestro trabajo es medir los parámetros bases, mediciones, que son las mismas de la contaminación del planeta. Estamos ubicados atrás del aeropuerto donde tenemos la mejor vista del Canal de Beagle y nos llega el aire más puro, pero cuando tenemos el viento norte podemos medir las concentraciones y la contaminación de la ciudad. De ahí viene el trabajo que hicimos para ver cómo se modificaron las concentraciones de los gases contaminantes antes y después de la cuarentena. Lo que empezamos a ver, desde la mitad de marzo hasta ahora, fueron las concentraciones de ciertos gases particulares que se producen por lo que es combustible fósil y el ozono. (…) En la cuarentena las concentraciones bajaron”.

“La ciudad de por sí es una ciudad chica, aunque tenga industrias no es una ciudad que tenga contaminación en niveles altos. Tiene un nivel bastante aceptable, además tiene la suerte de tener bosques y el aire se limpia fácilmente” “Tenemos el aire más limpio del país, mientras más al sur más puro” remarcó Condorí.