Los propietarios de locales gastronómicos en la ciudad de Río Grande exigen la reapertura con protocolo de la actividad al Gobernador Gustavo Melella porque viven una situación «dramática».
Mientras en Ushuaia, hay una apertura con protocolo en restaurantes hasta hay mesas que permiten 6 comensales, en Río Grande se ven imposibilitados de hacer lo mismo por la situación del COVID-19. Para el Propietario de Sonora Restobar, Rafael Chedrese, sentenció que hay una diferencia.
En declaraciones a FM MASTER`s dio cuenta de este panorama. «Tengo muchos amigos colegas en Ushuaia y ellos encararon el tema de otra manera, salieron a las calles, directamente a manifestarse. Lo que da a entender es que las autoridades le gusta que le salgan a las calles a hacer lío pero nosotros nos manejamos, vía carta, solicitudes, reuniones zoom pero por lo visto no da resultado esperado», disparó.
«No esta en nuestra cabeza salir a las calles, tenemos otra perspectiva», sentenció ya que «si Ushuaia puede abrir, cual es la situación en Río Grande. No se entiende la diferencia. ¿será que es la capital y tiene una vizibilización nacional?», sentenció
«Rogamos de una pequeña explicación, en base de eso tomar las decisiones en cada caso. Esta mal que nos hagan endeudar por un capricho. Se que hay una situación complicada sanitario pero no se que mas complicado puede estar si abrimos la confitera», finalizó.
El sector gastronómico resolvió lanzar un comunicado:
A 8 meses de haber tenido que levantar las sillas de nuestros locales, queremos expresar la dramática situación que estamos viviendo: hemos llegado al límite de no poder afrontar los costos fijos, el pago a los empleados y proveedores”.
“Los subsidios otorgados no alcanzan y se demoran demasiado. En un contexto de hiperinflación donde los aumentos no han cesado y en una ciudad donde pareciera que no hay restricción ni control real alguno para con las reuniones sociales, carece de sentido mantenernos cerrados”, afirmaron.
Es por esto que “Con el protocolo ya aprobado por el COE podemos ofrecer esas mismas reuniones en un espacio seguro y controlado”.
Por último, remarcaron “Por todo esto, nos manifestamos de manera intolerante ante la continuidad de la inhabilitación de nuestra actividad en nuestra ciudad y la lectura errónea que se demuestra en pos de ´proteger el bienestar de la comunidad´. Exigimos la reapertura con protocolo”.
