El director del Hospital Regional Ushuaia, Carlos Guglielmi llamó a los vecinos y vecinas de la ciudad a tomar conciencia en seguir las medidas de seguridad sanitaria para no seguir propagando el COVID-19.
En declaraciones a FM MASTER’S el médico dijo que en lo personal, su tarea la vive con mucha preocupación. «Cada vez que entró al hospital lo hago preocupado, ya no duermo en la casa. Todos los días es una partida de ajedrez en la cual uno tiene que estar viendo qué cama movilizar para ingresar a uno nuevo».
Acerca de la situación de capacidad hospitalaria, apuntó que «en este momento tenemos 11 internados en terapia intensiva y lo normal eran 6. Hoy tenemos una terapia refuncionalizada en la sala de pediatría donde además tenemos tenemos 7 o 8 mas y ya tenemos 5 internados. En la sala de adultos, de 28 camas, están ocupadas 25 y de las libres debemos diagramar qué paciente va al Polo o no».
«Todos los días tenemos un fallecido, la gente se está muriendo, y preocupa, no solo es la angustia, además la familia no lo puede ver o hacer el duelo habitual. Es una situación complicada, hablar con los familiares, la situación del profesional que esta adentro del hospital luchando con el COVID-19 es muy desgastante. Se mueren los pacientes y la familia con todo el dolor protesta y uno les explica, a veces entiendan u otra veces no. Todos los días aumentan los casos, los médicos se contagian, y uno piensa cuando termina esto», reflexionó el profesional.
«El hospital no está colapsado pero estamos en una situación crítica, mandamos pacientes leves al Polo Hospitalario pero si entran diez casos de golpe ¿que hacemos?», aseguró.
Por lo tanto sentenció que: «Es una impresión mía de que lo que pasa en el hospital es una realidad y la gente vive una realidad totalmente distinta afuera del hospital. Me comentaron que este domingo hubo asados en los campings, mucha gente tomando, festejando mientras la gente se muere y afuera esta todo absolutamente normal. A mi me da mucha pena, porque la gente no entiende y piensa que no tratamos a la gente, si un paciente ingresa a internación tiene muchas posibilidad de morirse, esto tiene un alto porcentaje de mortalidad».
«Que tome conciencia», fue el pedido de Gluelgemi a la comunidad a no relajar. «La gente debe entender que si a uno no le pasa, puede contagiar al abuelo cuando sale, se junta y se va a la casa y después le echa la culpa al hospital, es un stress, llega al punto que uno se agota».
«La gente de hospital está trabajando mancomunadamente, haciendo un trabajo increíble pero tiene un desgastante por eso pido a la gente que hagan una vida pero que disminuyan el contacto con la demás, pero háganlo indispensable, no estamos en un ambiente normal», remarcó y aclaró que «no pido volver a Fase 1, reuniones sociales no pueden haber», sentenció finalmente.
