A un mes aproximadamente de la apertura «piloto» de la temporada turística en la provincia y en Argentina, el Presidente de la Cámara de Turismo, Ángel Brisighelli hizo un primer balance. «Llegar a esa tibia apertura fue todo un procesado complicado que llegó a buen puerto. De ahí en adelante fue mejorando la situación; se agregaron vuelos con buena afluencia de pasajeros que no es la normal o usual de una temporada pero es mejor a lo que teníamos tiempo atrás», dijo en FM MASTER`S.
Acerca de la reserva hotelera dijo que «el gran impulso» fue el Programa Nacional Pre-viaje y con ello hubieron reservas. «Ahora bajo un poco, pero los niveles ocupacional son dispares. La estimación que hacemos es la gran mayoría están abierto y la expectativa es que hay un 35% de ocupación».
En la ciudad se observa hosteles de pequeña capacidad cerrados. «Hay varios por motivos diferentes, porque es una unidad de negocio que se basa en la comercialización de camas entonces personas que no se conocer entre sí se comparte habitaciones con 6 u 8 camas. Entonces el aislamiento social es imposible llevarlo adelante».
En la otra punta se encuentran los hoteles mas grandes ejemplo un nivel Arakur, «los problemas que tienen es que las circunstancias de que las fronteras están cerrados ,no hay cruceros, no pueden ingresar turistas extranjeros, obviamente esta cerrado porque su mercado no puede llegar a Ushuaia».
Otro problema que afronta el turismo de la ciudad «es el servicio, todos los prestadores, restaurantes, atracciones deportivas, etc, están con una capacidad ociosa alta, están dimensionadas para un volumen que no es este, sino algo mas grande».
«Hay muchos lugares disponibles y la única posibilidad de ocuparlo es con alguna política agresiva en el mercado local. Un montón de gente que no sale de Tierra del Fuego por diferentes como miedo, precaución o la cantidad de burocracia que hay en aplicaciones, certificados a lo largo del país que desalientan el viaje entonces deciden quedarse en la provincia, por ejemplo el de Río Grande que viaja y se queda en Ushuaia dos días, y para esa gente tienen ofertas agresivas con precios económicos», explico.
Para Brisighelli «siguiendo las normas», la actividad turística y otras actividades comerciales «se puede realizar» frente a la pandemia.
El funcionario aconsejó que «mientras mas barreras pones mas desalentas la llegada de personas a la provincia» de llegarse a incluir el análisis PCR o el hisopado como condicionante para ingresar a Tierra del Fuego. «Mientras mas cosas se pide, desalentas a la gente que quiere venir y todas las provincias estaba pidiendo un PCR» por ejemplo una persona que viaja de Ushuaia a El Calafate tenia que tener un PCR para ingresar a Buenos Aires, luego volver hacerlo para ingresar a Santa Cuz, es «una locura, imagínate una familia de cuatro integrantes».