Vuoto destacó todo el trabajo realizado durante la pandemia en 2020

“Quiero expresarles, a modo de breve introductorio, que el año que se ha ido nos deja a todos los niveles de conducción del estado, una fuerte responsabilidad que deberemos sobrellevar poniendo de nosotros el máximo de nuestro esfuerzo. Particularmente los municipios que somos el primer eslabón. Por ello, los insto a que nos acompañemos y acompañar a nuestros vecinos y vecinas a sobrellevar el largo camino de la superación y recuperación de la situación que hoy nos conmueve”; comenzó Walter Vuoto.

Continúo: “Ha sido un año que todos hubieran querido que no existiera; pero es el que nos tocó a todos y a todas. Eso no lo podemos cambiar, pero sí necesitamos es reflexionar sobre lo ocurrido, sacar conclusiones y ello es una obligación que debemos asumir padres, hijos y familias. Aunque mucho más, quienes tenemos responsabilidades institucionales; que detentamos un poder basado en la confianza de los ciudadanos”.

Asimismo, sostuvo que “muchas cosas han cambiado en el transcurso de los últimos 12 meses que nos ha llevado a realizar profundas modificaciones en el funcionamiento del municipio, lo cual hemos debido hacer en términos vertiginosos, porque si hay algo que caracteriza la pandemia, es que no da tregua y tampoco permite predecir resultados. Trabajar virtualmente es un término que suena sencillo, pero no lo es al momento de llevarlo a la práctica”.

Por ello, “adaptar el funcionamiento de los distintos organismos, en los que transcurren miles de estados administrativos y se canalizan necesidades objetivas de los vecinos y vecinas, ha sido un desafío que hemos sorteado positivamente”.

“Hacia afuera de las puertas del municipio, preparar nuestra acción a las necesidades sociales de una crisis explosiva, nos llevó a volcar el mayor esfuerzo humano y recursos económicos en áreas vinculadas a la contención social, a la medicina preventiva, a la preparación de espacios sanitarios, a la ayuda a nuestros pequeños y medianos empresarios”; agregó.

“Solicitamos ayuda y obtuvimos el acompañamiento del gobierno nacional con comunicación directa con sus áreas de trabajo y equipos técnicos”; afirmó Vuoto.

De manera tal que “montamos, frente a esta situación de emergencia, una organización de voluntarios acompañados por las distintas asociaciones intermedias, particularmente comisiones vecinales, que sin dudar dieron lo mejor de su esfuerzo personal y de sus organizaciones, para tener una mano a los que más necesitan. Eso es un saldo positivo que debemos extraer de esta crisis”.

Sobre el balance

En la apertura de sesiones, Vuoto expresó: “Tengo la obligación con nuestros vecinos y vecinas de dar cuenta de todo lo hecho, de explicar los motivos por los cuales tomamos cada una de las decisiones y de los resultados que logramos”.

Con la pandemia del COVID-19 en Ushuaia, “desde la Municipalidad nos reorganizamos rápidamente y asumimos como una máxima de la conducción y de la gestión política, que “Ocuparse es Prevenir”. No como un slogan de campaña, sino como un objetivo que debía traducirse diariamente en acciones concretas, que nos permitieran adelantarnos a las consecuencias negativas, para reducir los riesgos a los que se enfrentaba nuestra población”, manifestó.

Vuoto expresó que “nos pusimos manos a la obra para construir el Polo Sanitario, el cual es un símbolo de la solidaridad de todo el pueblo de Ushuaia y de Tierra del Fuego. El Polo Sanitario con 70 camas de internación con oxígeno, espacios para el personal médico y sanitario, camas de terapia intensiva y todo lo necesario para el cuidado integral de la salud, nos mostró que cuando se prioriza lo importante y se trabaja para lograrlo, todo es posible”.

“Nuestro Polo es uno de los 4 que existen en todo el país con estas características y nos ha permitido salvar muchísimas vidas. No es solo un edificio, si no que en realidad fue un barco que nos ayudó a atravesar esta tempestad cuidando la vida de toda la tripulación”; determinó el intendente de la capital fueguina.

Por otro lado, Vuoto añadió que, “el 11 de marzo realizamos la primera reunión de coordinación entre los equipos de salud, suspendimos los eventos públicos e hicimos obligatorio el uso del barbijo en la ciudad, antes de que lo fuera en todo el territorio de la provincia, pese a que nos acusaron de exagerados. Nos organizamos para fabricar mascarillas faciales, para producir alcohol desinfectante, armamos y distribuimos kits sanitizantes a todo el personal esencial, a los profesionales, a los comerciantes, a los gastronómicos, al sector del turismo”.

“Aumentamos la ayuda social, pasando de acompañar a 900 familias por mes a más de 7.000 familias con módulos alimentarios. En el plazo de 48 horas, las familias recibieron su asistencia, para que en ningún hogar faltara lo necesario”; informó.

También, “junto a PAMI, armamos una red solidaria para acompañar a nuestros adultos mayores por medio de la asistencia telefónica y una red de voluntarios y voluntarias para hacerles sentir que no estaban solos, que había toda una ciudad que quería cuidarlos y cuidarlas”. Detalló que fue una atención telefónica que “funcionó de lunes a lunes con horarios especiales y un promedio de 300 llamadas atendidas de forma diaria”.

“Desinfectamos los espacios públicos, los vehículos, los lugares de alto tránsito, creamos la coordinación de epidemiología, brindamos capacitaciones y charlas a todo el personal, reforzamos la red de ambulancias y llevamos la Unidad Sanitaria Móvil a todos los barrios de la ciudad, para descomprimir la presión sobre el sistema sanitario, llegando a más de 8 mil vecinos y vecinas”.

Paralelamente, Vuoto destacó que “con el programa DetectAR salimos a los barrios, casa por casa a buscar a aquellos vecinos o vecinas que estaban contagiados y no tenían respuesta o confirmación. Innovamos y generamos nuevas metodologías, como las jornadas de hisopado masivas para que todos aquellos y aquellas que tuvieran síntomas o contactos estrechos pudieran saber su situación epidemiológica”.

Con dichas acciones, “entendimos desde el primer momento que la crisis era bifronte, tenía una cara sanitaria, pero también tenía un duro rostro económico. No solo el turismo desapareció, sino que se derrumbó el comercio y la actividad productiva, afectó a todo el tejido social de nuestras familias. El sector comercial, industrial y de servicios tuvo un impacto negativo desastroso. Con facturación 0 en el momento más álgido de las medidas preventivas, luego se fue recuperando tímidamente”.

Del lado económico, Vuoto rescató que, “el día 13 de marzo, anunciamos las primeras medidas económicas y trabajamos junto a sindicatos, cámaras y asociaciones para tomar decisiones de forma conjunta que atendieran las necesidades de cada sector”. De forma que “nació el Plan de emergencia para PYMES, un paquete de medidas consensuadas con las distintas cámaras, por un plazo de 60 días, el cual se extendió y se redujo el 100% el primer mes y al 50% el segundo, de la Tasa Comercial para las PyMES”.

“Tasa General, suspendimos el cobro del Fondo de Deporte, el Fondo Vial para las PyMES y generamos planes de pago para deudas atrasadas de hasta 72 cuotas. Más de 2 mil PYMES fueron beneficiadas por estas medidas”; afirmó.