Llega la tercera edición de la «Semana de la No Dulzura»

Desde el lunes 26 y hasta el sábado 31 de julio, se celebrará en Argentina la tercera edición de la “semana de la no dulzura”, una campaña de bien público que emerge de la sociedad civil con el propósito de generar conciencia sobre la importancia de moderar el consumo de azúcar y promover una mejor educación alimentaria para prevenir enfermedades.

La campaña de este año tiene como lema “¡Azúcar oculto, al frente!”, con el fin de apoyar la implementación de la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos la cual busca proteger y garantizar el derecho a la salud y a la información. Cabe recordar que esta ley obtuvo en 2020 media sanción en el Senado y el último 13 de julio obtuvo dictamen en Diputados.

Según estudios recientes en Argentina, se consumen 114 gramos de azúcar diarios por habitante, el triple de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud que va entre los 25 y 50 gramos. Este exceso contribuye al crecimiento de la obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles (como la diabetes, el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y enfermedades cerebrovasculares), que son la primera causa de muerte en el país.

Más de la mitad de los productos que hoy están en góndolas contienen azúcar, la cual está presente en productos impensados como por ejemplo pastas de dientes, pan de molde, salsas, aderezos, pizzas congeladas, entre otros. Asimismo, este ingrediente está en mayores proporciones a las que pensamos e identificada muchas veces con nombres o siglas de difícil reconocimiento (como jarabe de maíz o JMAF, fructosa, sacarosa, sirope de agave, dextrosa, melaza, panela, jarabe de glucosa, concentrado de fruta, melaza, etc.).

La iniciativa surgió en 2019 como una reacción frente a la famosa semana de la dulzura, que nació en 1989 para promover el consumo de golosinas en kioscos. Esta semana, en cambio, promueve una alimentación saludable y la compra en dietéticas y verdulerías.

Por último, la #semanadelaNOdulzura apoya en 2021 la iniciativa del sistema gráfico de advertencias (octógonos negros) que busca visibilizar en los envases aquellos ingredientes críticos que en exceso resultan nocivos para la salud (como azúcar, grasas, sal o calorías) y le permiten al consumidor tomar decisiones de compra mejor informadas.