Se difundió un nuevo informe sobre los orígenes del COVID

Por el mes de mayo, el presidente Joe Biden ordenaba a la Comunidad de Inteligencia de los Estados Unidos una investigación sobre el origen del CORONAVIRUS SARS-CoV-2, las hipótesis estaban divididas entre un origen debido a un accidente de laboratorio y uno debido al contacto humano con un animal infectado.

El informe clasificado llegó el 24 de agosto y para fines de ese mes se hizo pública una versión sin clasificar.

¿El resultado principal? Que la investigación no fue concluyente, la única conclusión sólida es que el COVID no se desarrolló como arma biológica.

Según informa Nature, Biden pidió a la IC que analizara tanto las hipótesis de origen natural como las de laboratorio, a la vez que pedía también incluir a los científicos en la investigación. Dicho informe resultante revela que el Consejo Nacional de Inteligencia y 4 grupos de inteligencia se inclinaron hacia un origen dado por una persona naturalmente infectada por un animal.

Paralelamente, otro grupo se inclinó hacia la hipótesis de liberación accidental —en parte debido a la «naturaleza intrínsecamente riesgosa del trabajo con CORONAVIRUS»— y otros 3 grupos estaban indecisos.

«Lo más probable es que se necesite la cooperación de China para llegar a una evaluación concluyente de los orígenes de COVID-19», se lee. Asimismo, se agrega que Beijing se resiste a compartir información.

Los detalles más precisos de lo que evaluaron las agencias de inteligencia que formaron parte de la investigación siguen siendo desconocidos para el público, aunque se sospecha que podrían tener que ver con secuencias genéticas del virus asociadas con el Instituto de Virología de Wuhan posiblemente extraídas de las bases de datos disponibles online.

Lo que si sostienen es que el virus no se desarrolló como arma biológica y que los funcionarios chinos no tenían conocimiento previo del virus antes del brote inicial que desencadenó la pandemia.

Finalmente, en el informe se lee que la comunidad de inteligencia no podría llegar a una conclusión más definitiva a menos que reciba más información.

Mientras que la OMS publicó el 20 de agosto un aviso pidiendo a científicos de unos 20 campos, incluida la seguridad de laboratorio, la medicina veterinaria y la virología, para que se postulen para formar parte de un comité científico sobre los orígenes de patógenos emergentes, quienes van desde el SARS-CoV-2 hasta el Ébola.

Cabe mencionar que el grupo, llamado Grupo Asesor Científico para los Orígenes de un Nuevos Patógenos, asesorará sobre la investigación de los orígenes del COVID-19 de la fase 2 y ayudará a que los estudios futuros comiencen antes, cuando los primeros eventos de un brote aún sean recientes.