El Gobierno nacional volvió a reunirse con la organizaciones sociales -nucleadas bajo Unidad Piquetera- para desactivar el conflicto desatado en las últimas semanas, tras el acampe en Avenida 9 de Julio. Las organizaciones exigen que se reabran las inscripciones al plan Potenciar Trabajo y amenazan con reactivar el plan de lucha.
A partir de lo sucedido hace 2 semanas, el Gobierno nacional endureció su discurso contra los cortes de calles, dejó en claro que no darán más altas de planes sociales y subrayó su intención de convertir la asistencia estatal en empleo registrado.
El conflicto es, principalmente, con las organizaciones más radicalizadas, y se enmarca, además, en una interna dentro de ese sector, ya que algunos dirigentes, como Emilio Pérsico, del Movimiento Evita, trabaja en el Ministerio de Desarrollo y cuestionó las movilizaciones.
El jueves pasado, finalmente, las organizaciones se reunieron con el ministro de Desarrollo: Zabaleta ofreció un refuerzo de alimentos para los comedores y merenderos y «3 mil emprendimientos productivos nuevos».
En el encuentro de esta tarde estarán, por el Gobierno, el titular de la cartera de Desarrollo Social; Emilio Pérsico, del Movimiento Evita y secretario de Economía Social; Gustavo Aguilera, secretario de Articulación de Política Social; y Pablo Ariel País, titular de la Unidad Ejecutora del Programa Nacional de Inclusión Socio-Productiva y Desarrollo Local Potenciar Trabajo. La delegación de Unidad Piquetera estará encabezada por Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero.
Desde que se desató el conflicto, el Gobierno adoptó medidas destinadas a mitigar el impacto de la aceleración de precios -fundamentalmente en alimentos-, como el aumento en la Tarjeta Alimentar y el bono para jubilados y pensionados y beneficiarios de asignaciones familiares y universales.
