Yutrovic: “Todo desarrollo productivo es importante hoy por hoy en nuestro país”

En el marco de la sesión especial del día de la fecha, la Honorable Cámara de Diputados del Congreso de la Nación otorgó media sanción al proyecto de ley que regula el desarrollo de la industria del cannabis medicinal y del cáñamo industrial.

Con 155 votos a favor, 56 en contra y 19 abstenciones, diputadas y diputados se hicieron eco de un proyecto construido colectivamente por cientos de organizaciones cannábicas que han militado la ampliación del uso terapéutico del cannabis al que ahora se le agrega además la recuperación de una actividad productiva que es la del cáñamo.

Durante la discusión, la Diputada de Tierra del Fuego AIAS por el Frente de Todos Carolina Yutrovic sostuvo que «hablamos de recuperación porque el cáñamo es un cultivo que se fue perdiendo por estigmatizaciones debido a que se metió en la misma bolsa todos los tipos de especies cannábicas y nos perdimos la oportunidad de sostener una actividad económica importante para nuestro país que siempre necesita generar más economía y más empleo».

Asimismo, la parlamentaria aseveró que «seguramente esta no es la ley que muchas organizaciones, ciudadanos y ciudadanas esperan, y seguramente se puede seguir perfeccionando, pero es un avance importante en función de los marcos regulatorios que se vienen trabajando desde 2017».

«El cáñamo es una industria que va a generar una oportunidad de desarrollo sostenible para la producción de bioplástico y eso tiene un potencial económico que, según nuestro Ministerio de Desarrollo Productivo, en la actividad conjunta del cannabis medicinal y la del cáñamo, para el año 2025 se proyectarán al menos 10 mil nuevos empleos, y 500 millones en ventas al mercado interno y otros 50 millones en exportaciones. Es un punto a tener en cuenta, ya que no se da la panacea, pero todo desarrollo productivo es importante hoy por hoy en nuestro país», explicó Yutrovic.

En este sentido, la representante del pueblo fueguino en la cámara baja reconoció «a esos cultivadores solidarios, pequeñas cooperativas y asociaciones y a esas personas empáticas y solidarias que se encargan hoy donde el estado no llega y donde los marcos regulatorios restringieron esa posibilidad, de asistir con trabajo gratuito y solidario y sostener a muchas personas que por sus dolencias o padecimientos necesitan cannabis para mejorar su calidad de vida y lo hacen gratuitamente y desinteresadamente. Voy a hacer reconocimiento en particular a una organización de mi provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur y voy a nombrar a Raíces del Fuego y en ellos a todas las organizaciones fueguinas que hacen esta tarea y este trabajo donde el estado aun no puede llegar».