Finalizó la construcción de la platea de la base naval intedraga

El Ministerio de Defensa confirmó la culminación de la estructura que albergará al Comando Conjunto Antártico, un paso clave para consolidar a Ushuaia como puerta de entrada al continente blanco y reforzar la soberanía nacional.

La obra de la futura Base Naval Integrada de Ushuaia alcanzó un hito fundamental con la finalización de su platea, según informó este sábado el Ministerio de Defensa. Se trata de un galpón modular que brindará al Comando Conjunto Antártico (COCOANTAR) un espacio operativo propio, moderno y funcional para la planificación de campañas y el sostenimiento logístico de las bases argentinas en la Antártida.

La cartera de Defensa, a través de un comunicado en la red social X, destacó que la construcción estuvo a cargo de Tandanor, empresa especializada en ingeniería naval. «Esta estructura permitirá optimizar la organización de las misiones antárticas, dejando atrás la dependencia del muelle comercial», señaló.

Además, subrayó que el proyecto forma parte de una estrategia más amplia para posicionar a Ushuaia como el principal acceso argentino al continente blanco, reforzando tanto la soberanía como la eficiencia operativa.

El texto oficial también incluyó un mensaje político: «Con el presidente Javier Milei seguimos impulsando mejoras que refuerzan y proyectan nuestros 121 años de presencia ininterrumpida en la Antártida».

La declaración enmarca la obra dentro de una política de Estado que trasciende gestiones, aunque la actual administración ha acelerado su desarrollo. 

La Base Naval Integrada no solo es un avance logístico; representa un salto cualitativo en la proyección argentina sobre el Atlántico Sur y la Antártida. Su ubicación en Ushuaia -la ciudad más austral del mundo- permite un despliegue rápido hacia el Paso Drake y el sector antártico reclamado por Argentina, facilitando el control de rutas marítimas críticas y la vigilancia de actividades extranjeras.

Expertos coinciden en que la infraestructura fortalecerá el papel del país en el Tratado Antártico, especialmente de cara a una posible renegociación post-2048. La presencia física continua, sumada a la capacidad científica y militar concentrada en la base, podría inclinar la balanza en futuras disputas territoriales. Además, su operatividad podría redefinir la dinámica con actores como Chile, Brasil y el Reino Unido, este último en el contexto de la disputa por las Malvinas.

Con esta obra, Argentina no solo moderniza su equipamiento, sino que envía un mensaje: su compromiso con la Antártida es una prioridad estratégica, con Ushuaia como eje de sus aspiraciones soberanas y científicas en el continente blanco.