Una concentración este viernes frente a la Casa de Gobierno exigirá soluciones urgentes al colapso en la atención médica y la regularización del sistema de salud provincial.
Un grupo de jubilados y activos autoconvocados se manifestará el próximo viernes a las 19 horas frente a la Casa de Gobierno de Tierra del Fuego para exigir la regularización y jerarquización de la obra social provincial.
La protesta, según aclararon sus organizadores, carece de consignas políticas o partidarias y busca visibilizar la grave situación que afecta a los afiliados.
Guillermo Torre, jubilado y referente de la convocatoria, explicó los motivos de la movilización. “Quedarnos sin obra social, tanto activos como pasivos, es una barbaridad. Es de una gravedad absoluta no tener dónde concurrir cuando uno tiene una enfermedad, cualquier patología más grave, han quedado paralizadas operaciones, asistencia a patologías de gravedad, consultas médicas, es un desastre lo que pasa con esto”, afirmó Torre en diálogo con FM Master’s.
El referente detalló el deterioro del sistema de salud, criticando la dependencia de un único prestador privado y el abandono del hospital público. “Vivimos atados a un solo prestador. En otras épocas existía el hospital como base de atención fundamental, hoy lo es en calidad de prestaciones médicas, los profesionales son de primera, las instalaciones son lamentables”, señaló.
Además, reveló la crítica situación financiera de OSEF: “No le pagan a Sánchez (Posleman, de la clínica privada), que le deben casi 4.000 millones de pesos… o que supera los 5.000 millones. Y no hay un solo médico fuera de la clínica que atienda”.
Torre cuestionó la falta de transparencia en la gestión de los fondos. “Nunca salieron a contarnos cuánto se recauda, cuánto se gasta. Lo hemos averiguado, yo tengo el escritorio en este momento de mi casa lleno de papeles que conseguí”, indicó.
La convocatoria nace de la desesperación ante la imposibilidad de acceder a tratamientos. Para el jubilado, la solución de fondo pasa por recuperar el hospital público. “Gastaríamos mucha menos plata si tuviéramos el hospital funcionando, como era antes”, insistió, mientras denunciaba el eterno retraso en las obras del nuevo nosocomio.



