Médicos prófugos: Giménez acusó a la Justicia fueguina y la defensa de la victima de prolongar el caso por diez años

El abogado Francisco Giménez en representación de los Dres. Raúl Jerónimo Rauch y Juan Carlos Martínez Montenegro solicitó el pedido de prescripción de la causa de mala praxis al cumplir el pasado fin de semana los 4 años del momento de elevación a juicio de la causa del 2012.

Cabe recordar que los médicos Rauch y Martinez Montenegro están acusados de no haber prestado la atención médica necesaria a una paciente que en 2012 finalmente sufrió un ACV, anulándose un juicio en el que fueron absueltos y no presentándose al segundo juicio que se pautó el pasado 14 de febrero.

Ahora la jueza interviniente, la subrogante Cecilia Cataldo, correrá vista a la fiscalía y a la parte querellante para que respondan.

De igual manera la medida de prescripción puede aplazarse hasta que los médicos; aún con paradero desconocido, se ajusten a derecho y se presenten personalmente ante la Justicia para el avance de este pedido de caducidad de la causa.

En declaraciones a FM MASTER´s, el abogado Francisco Giménez explicó que «es una causa donde dos médicos fueron acusados de mala praxis en el 2012, el año pasado se realizó el juicio oral, donde fueron absueltos de libre de culpa y cargo. Mientras que el STJ se tomó un año para responder a la apelación de la querella y en enero anuló la sentencia y hacer un nuevo juicio oral en diez días pero los acusados no se encontraban en la isla, en el caso de los doctores, tenían pasaje de ida en diciembre y la vuelta en marzo».

«Para nosotros la causa estaba prescripta en dos años, pero una nueva interpretación de la Justicia Fueguina dice que son cuatro, y eso se cumplió en febrero por lo tanto esa causa esta prescripta y solicitamos el sobreseimiento de los médicos y que se elimine toda captura nacional e internacional», agregó.

«Los profesionales médicos no se presentaron por distintos motivos, por estar fuera de la provincia cuando no tenían ninguna restricción para circular, y nunca fueron notificados de forma personal de que la absolución fue revocada», aseguró. Por lo tanto, ante la situación «mi consejo fue de que vuelvan cuando lo tenían previsto ya que de ninguna manera los iba a sentar en un juicio que iba a hacer una falsa cuando la sentencia condenatoria ya estaba escrita pese a que fueron absueltos en su momento».

Asimismo «no es un agravante que los acusados se ausenten al juicio» y «para asegurar su libertad definitiva le dijimos que esperen a que la sentencia este prescripta y que esperen hasta donde le digamos y así fue».

En este sentido, fustigó en que «la justicia de Tierra del Fuego se tomó diez años en investigar esta causa, las personas estuvieron a disposición de la justicia durante el anterior proceso, fueron cada vez lo que citaron, tuvieron un juicio oral y tenían un permiso para salir».

«Durante los diez años fueron mortificados por parte de la justicia que en su paso lento y negligencia  resolvieron esto en diez años. Entonces nuestra pregunta es como puede ser que en una causa simple y sencilla la justicia se tome diez años y lo que quiera ahora resolver en un mes violando todos los derechos y garantías de los ciudadanos», cuestionó.

También fustigo contra los abogados de la victima ya que «fueron responsables» de prolongar esto durante diez años. «No es mi problema. No han hecho nada para impulsarlo y ahora les tomo el apuro. El principal responsable de esto es la justicia fueguina donde no hay garantía para el ciudadano común para tener un juicio parcial».

«Como abogado defensor  tengo la responsabilidad de que un ciudadano tenga un juicio imparcial y que estén dadas las garantías y no lo tengo tengo los resortes legales», sentenció.